La familia Verlac es una familia de cazadores de sombras.
Historia[]
En el siglo XIX, un miembro de esta familia, Theodor, falleció, y un demonio calumniador creó rumores sobre cómo había estado casado con una cazadora de sombras persa, Sona, y que ella lo había matado; si bien esto no era cierto y la joven afectada derrotó al demonio, los rumores sobre Theodor persistieron durante años.[1]
A inicios del siglo XX un miembro de esta familia logró recuperar la posición como líder del Enclave parisino, y deseaba que los Verlac mantuviesen el control del Instituto local;[2] hacia finales del siglo XX los directores del Instituto de París pertenecían a esta familia, y tenían una buena relación con Lisette y Jules Montclaire. Debido a ello, nunca atendieron la petición de asilo de Céline Montclaire, a la que siempre devolvían con sus padres.
En el cambio de siglo los Verlac aún dominaban el Instituto, pero el matrimonio de directores de aquel entonces murió en un enfrentamiento con demonios, siendo sucedidos en el cargo por Élodie Verlac (hermana del marido), quien también asumió la custodia de su sobrino, Sebastian.
Sebastian sería posteriormente asesinado por Jonathan Morgenstern, quien asumiría su identidad temporalmente y luego utilizaría solo su nombre.
Miembros conocidos[]
- Theodor Verlac
- Sr. Verlac
- Esposa no identificada
- Sylvain Verlac, su hijo
- Esposa no identificada
- Verlac no identificado
- Eunice Penhallow, su esposa
- Élodie Verlac, tía paterna de Sebastian
- Leon Verlac, primo lejano de Sebastian
Etimología[]
El apellido Verlac se compone de las palabras francesas ver ("gusano", o menos frecuentemente, "serpiente") y lac (lago).
Cassandra Clare decidió usar el término ver porque sonaba muy parecido a verre (cristal), queriendo evocar con el apellido el concepto de lago cristalino.
Símbolo[]
El símbolo de la familia Verlac es una serpiente de agua saliendo de un lago.[3]
Trivia[]
- Se deduce que gozan de buena posición en la sociedad nefilim francesa, ya que se sabe que desde hace más de dos décadas dirigen el Instituto de París.
- Se desconoce si esto es por méritos de sus miembros o por presiones a La Clave.
Referencias[]