La Eternidad era un símbolo de Rhiannon brindado por las hadas a la familia Rosales, con quienes tenían una estrecha relación desde antes de la Paz Fría.
Descripción[]
Esta reliquia es una pieza pulida que forma el símbolo del infinito. Emite un leve resplandor dorado, y al usarlo, su magia es automática: el usuario desaparece y aparece inmediatamente en un punto de Feéra. Sin embargo, si la persona no ha especificado un lugar al que viajar dentro del reino feérico, el artefacto lo escogerá por él, con los riesgos que esto implica.[1][2]
Historia[]
En el pasado, un miembro de la familia Rosales ayudó a un miembro de la familia de hadas que guardaba este símbolo, que fue entregado al nefilim como regalo. Al igual que otras reliquias familiares (como el collar que usaba Cristina Rosales), que permitía entrar a Feéra más fácilmente y que el paso del tiempo no les afectara), la Eternidad fue pasada de generación en generación en la familia Rosales, y en el siglo XXI pertenecía a la rama de Diego y Jaime Rosales.
En algún momento Horace Dearborn, fundador de la Cohorte (un grupo de cazadores de sombras que odiaban a las hadas y al resto de los subterráneos) se enteró de la existencia de esta reliquia y para poder tener control sobre ella prometió a su hija Zara en matrimonio con Diego, guiado por el falso rumor de que sólo los miembros de la familia Rosales podían controlar el poder de la Eternidad.
En 2012 Jaime huyó de su casa con la reliquia y fue a parar al Instituto de Londres en donde se estaban hospedando los Blackthorn. Allí fue escondido del resto por Dru y cuando él se marchó apresuradamente se olvidó de su mochila, dentro de la cual estaba la reliquia. Dru la tomó y la misma la transportó momentáneamente a Feéra, en donde conoció a Ash.[3] Posteriormente Jaime se lo dio a Cristina para una misión, y ella se convirtió en la nueva guardiana de la reliquia.[4]
Apariciones[]
- El Señor de las Sombras (primera aparición)
- La Reina del Aire y la Oscuridad (Identificado/a por primera vez como Eternidad)