El Mandikhor es una rara y presuntamente extinta especie de demonio que tiene la habilidad de generar a partir de sí mismo múltiples demonios conocidos como Khora. Se dice que son sumamente venenosas.
Descripción[]
El Mandikhor en sí es aproximadamente del tamaño de un ómnibus y se describe como teniendo un cuerpo de león y una cola de escorpión. Tienen tres hileras de mandíbulas que gotean veneno y garras rojas que se extienden desde sus patas; mientras que icor negro sale de sus oídos y boca. Su cabeza tiene escamas, con ojos rojos y casi se parece a una serpiente.
Cuando están en su dimensión de origen adquieren características nuevas como: rugido similar al trueno, un gran aumento de tamaño (al menos tres veces mayor que cuando están en la dimensión de los nefilim), su cuerpo se ve cubierto por múltiples enfermedades como peste bubónica, la viruela, incluso la lepra además de que tiene trozos de piel colgando como si hubiera sido atacado con ácido mientras que otras partes de su cuerpo están rojizas debido a la escarlatina.
Hacen sus hogares en lugares liminales como puentes y fronteras, ya que al momento de crear a los demonios Khora estos son parte de él pero también son individuos, en cierta manera está en dos lugares al mismo tiempo.[1]
Historia[]
Los demonios Mandikhor existieron en Persia hace siglos (donde eran llamados Merthykhuwar y con el tiempo su nombre cambio a Mardykhor al día de hoy). Han aparecido muy pocas veces a lo largo de la historia por lo que se cree que están extintos al igual que los dragones. Se descubrió que es mejor capturarlos en un Pyxis para evitar que genere más y más demonios sin cesar.
Trivia[]
Apariciones[]
- La cadena de oro (primera y única aparición)
- La cadena de hierro (mencionado/a)
- La cadena de espinas (mencionado/a)
Referencias[]